A sus 27 años pesaba 470 kilos y fue acusada por la muerte de un niño de 2 años.

Mayra Rosales, conocida como la asesina de media tonelada, no podía moverse por la gran cantidad de kilos que pesaba.

Los golpes y maltratos de su madre la marcaron desde su infancia, pero eso no fue todo pues padeció más cuando vi a su padre con otra mujer.

Una vez que su padre decidió irse de la casa, Mayra empezó a subir de peso porque sentía que la comida era lo único que la hacía feliz, pero luego se descubrió que padecía de un problema en la tiroides y un cuadro de depresión.

Su aumento de peso inició a perjudicar su salud, incluso no podía pararse de la cama, hasta que dejó de caminar y su esposo era quien la cuidaba.

En el 2008 Mayra fue acusada de asesinato a su sobrino y desde ese entonces los medios de comunicación se enteraron del caso de la mujer de casi media tonela que cayó encima del niñoy le provocó la muerte.

Luego de un largo juicio, se supo que Mayra era inocente pero que sé echó la culpa para cubrir a su hermanita menor.

Tras estos fuertes problemas en su vida, Mayra perdió a su esposo pero siguió adelante y se sometió a seis largas y dolorosas cirugías.

Actualmente la mujer más gorda de la historia consiguió bajar esos kilos de más y ha logrado perder más de 400 kilos.

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