- Por Radio Onda Cero
- 26 Abr 2024
Un taxista peruano vivió un incómodo momento por devolverle un iPhone a una despistada pasajera. El hombre apeló a su honestidad, pero en vez de recibir unas felicitaciones, su gesto le causó más de una complicación. Su relato es viral en redes sociales.
En el video, compartido en TikTok y YouTube, el conductor contó que le realizó un servicio a una mujer, desde San Isidro hasta San Juan de Lurigancho, mediante la aplicación InDrive. Sin embargo, la joven abordó su vehículo en estado de ebriedad y terminó vomitando en el interior.
Tras ello, el taxista dejó la chica en su destino y se fue de inmediato al grifo más cercano para limpiar su unidad de transporte. En ese momento, mientras estaba limpiando, el hombre se encontró el iPhone que le pertenecía a su última pasajera.
A los pocos minutos, recibió una llamada en el celular extraviado de un joven, quien le pidió devolver el dispositivo en un domicilio en específico. El hombre aceptó con gusto, pero cuando llegó al lugar indicado, otra mujer le exigió que devolviera el teléfono.
El taxista, con cierta incomodidad, le pidió que llame a la dueña del celular, porque no se lo iba a entregar a ella. La desconocida se negó a pasarle la voz a la pasajera, ya que aparentemente no quería darle ni un sol a cambio.
“Quise que salga la pasajera, pero la señora se puso nerviosa porque era un condominio y no una casa. Soy honrado, pero eso no quita el servicio de delivery que hice”, dijo.
Ante la negativa del conductor, la mujer reaccionó de la peor manera y comenzó a grabar su automóvil. Por fortuna, la mamá de la pasajera llamó al celular y pidió que se lo entreguen ella. Ambos pactaron un lugar y logró devolver el iPhone a su verdadera dueña.
Usuarios apoyan al taxista
El caso del taxista se volvió viral en redes sociales, donde cientos de usuarios elogiaron su honestidad al devolver el teléfono. Es más, indicaron que se debería pagar a los conductores por este tipo de actos.
“Me alegra saber que hay personas honradas en esta vida. Muchos éxitos en tu chamba, maestro”, “Malcriada la señora, en vez de dar las gracias”, “A veces por ser bueno con la gente se ponen espesos… Cosas de la vida…” o “Algunas veces por bueno pasan estas cosas, por eso es mejor ser bueno y precavido, yo lo dejaría en alguna comisaría”, comentaron.