Muchos actores deciden retirarse de la actuación para dedicarse a otras cosas y quizá este fue el caso del buen Daniel Radcliffe, quien quiso ser recepcionista por una hora y el resultado fue que…bueno, es mejor que se quede en la actuación.

Mira la “desagradable” hora que tuvo que pasar Daniel en la oficina de la compañía de medios de comunicación y revista Nylon, muchas personas ni lo reconocieron: